Mi quimono

japanese style kimono

Lujosos quimonos usados cobran vida cuando los socios del club kiwanis de Wakayama les prueban estas elegantes prendas a las niñas que debutarán en la celebración de mayoría de edad.

Las tres niñas se acurrucaron, tímidas e inseguras al principio, pero luego de que fueron envueltas en hermosos quimonos de seda color azul y rojo, se miraron sonriendo y comenzaron a alargase unas a las otras gritando: “¡kawaii!” (“¡Qué hermosos!”).

La tradición japonesa Shichi-Go-San, que significa “7-5-3”, se originó hace muchos siglos para conmemorar los cumpleaños de los niños que en ese entonces no llegaban a vivir pasado su tercer cumpleaños. La calidad de vida ha cambiado pero la festividad sigue siendo una celebración sobre el bienestar de los niños.

Si no fuera por la generosidad del club kiwanis de Wakayama, las tres niñas de Kobato Gakuen, una institución de bienestar social ubicada en la parte centro sur de Japón, no hubieran podido participar de este rito. Una de las socias del club prestó el quimono que su hija y su sobrina habían utilizado en su momento. Otra socia dueña de una peluquería peinó y maquilló a cada niña según la costumbre. Los socios también donaron chitoseame– palitos dulces rojos y blancos presentes durante los festivales infantiles – y organizaron una sesión de fotografía en un estudio fotográfico para que las niñas pudieran recibir un portarretrato de ellas.

着物の布

Todo esto lo hacemos para que los niños puedan tener recuerdos… esos que duran toda la vida. La socia del club Wakayama, Noriko luchi, aún recuerda lo especial que se sintió cuando de niña participó del evento. Recuerda vívidamente como se sintió “adulta” al vestir el quimono y caminar de la mano de su mamá y papá para no caerse por las escaleras del Shinto shrine.

La agencia de bienestar social no recibe suficientes subsidios, por lo que organizaciones como Kiwanis ayudan y brindan programas para que los niños huérfanos puedan experimentar una niñez como cualquier otro niño.

“Muchas veces, los niños terminan en estas instituciones por los adultos”, dice luchi. “Queremos que los niños recuerden que existen adultos que los entienden, aceptan y se preocupan por ellos”.